„Tra­ducir un texto ciñén­dose demasi­ado al orig­i­nal suele dar como resul­tado un texto en cierto modo arti­fi­cial, pues es imposi­ble que lo que es nat­ural en un idioma, lo sea tam­bién en el otro.”

(Got­thold Ephraim Less­ing , Laokoon, 1766, tra­duc­ción propia)